jueves, 10 de marzo de 2011

boohooo !!

Depresión depresión depresión. Que depresión forra del orto que te agarra cuando sabes que día y hora vas a sacar tu hermoso y crecido culo de USA...

Hacía mucho que no lloraba. Lo peor? No lloro de alegría, ahora pienso que podría haber extendido ...


mmmmm

Maybe not ...

miércoles, 9 de marzo de 2011

Estudios Segunda parte.

Les cuento que cada día queda menos y con el queda menos digo que me quedan menos experiencias para vivir, por lo menos en este país. También voy entrando en una especie de crisis emocional con sabor a que mierda voy a hacer de mi vida cuando vuelva y no me quiero volver pero quiero pero no.

De todas formas todavía me quedan un par de obligaciones legales por cumplir. Una de esas son mis 72 horas de estudios.

La historia es así. Antes de venir yo sabía que tenía que cumplir con todas esas horas de estudios y me imagine tomando clases re copadas tipo una película. Pero cuando llegué me las arreglaba con el inglés rústico-mendocino el cuál me habilitaba para decir que tipo de comida quería y cosas básicas, por lo que me llevó a la sabia y no tan meditada decisión de postergar el cursado de cualquier clase para unos meses más tarde sino me iba a sentir como cuando te sentas en la mesa el domingo con toda la resaca del barrio, porque claro la noche anterior fuiste, según lo que te contaron, el alma de la fiesta, y evaporas químicos cual fábrica textil y te hacen preguntas y te hablan y vos solo moves la cabeza. De todas formas y volviendo a lo que nos compete, mi vida privada, la otra chance era ir a inglés en un país de habla inglesa, en mi caso me pareció medio pan con pan la historia. Ahora me doy cuenta que era una chance ENORME para sumar horas, pero los mendocinos somos así vio!

Así fue como después de esos meses me dije “es hora de que estudies algo, sino te buscas un laburo y te vas de casa. No pelotuda de casa ya te fuiste y te lo tomaste a pecho porque te viniste a la loma de la zorra , laburo tengo asíque solo me queda estudiar”. Fui a recorrer varias universidades, comúnmente llamadas Collage (léase Colish), me sumergí en la búsqueda de clases, pero descubrí que no era como en las películas en donde el personaje decide estudiar y escena siguiente está sentado en un aula con 200 extras. Estudiar en este país sale caro. Entonces lo que te quedan son las clases comunitarias, cursos. Para que se den una idea, la búsqueda de estos cursos es como ir a un Outlet y tener que revolver todo para encontrar algo potable. Así fue como encontré durante la primer tanda “Vinos del Nuevo mundo“, “pintura en acrícilo, “fotografía“ e “Italiano I y II“ . Durante la segunda tanda (no de madrugadores) me topé que no solo tenía el problema del dinero, sino también del tiempo y así fue que “Vinos de Europa”, “introducción al habla público” y “Té y chocolate” fueron las elegidas. La última me toca mañana y consta de una sola clase, onda no pretendamos más de dos clases para hablar de chocolates y té.

Mi primer contacto con el estudio fue Italiano. Me acuerdo que llevé hasta el mapa para no perderme porque la universidad es enorme. Cuando entré al edificio me encontré con una de mis compañeras y bueh la mujer tenía unos 60 años y así era el promedio de compañeros. A la hora de conocer al profesor me tiraron de un hondazo toda esa fantasía que uno tiene del profesor de Italiano. Sexi, morocho con mirada fuerte y evidentemente riquisimo. Pero evidentemenente en el mundo de Conchita las cosas no pasan como tienen que pasar. El profesor era viejo y panzón. Se cargaba una bermuda con una camisa floreada. Y yo choqué con la desilusión de tefrén y me hice mierda. Acto seguido cuando me senté en la mesa me di cuenta que era una de las dos personas que no tenian el libro. Claro ¿porqué perder la costumbre? Nunca estoy dentro del porcentaje que tiene todo. Es como cuando sos chico y la maestra te pide que lleves 100 palitos de helados y vos caes con 75 y no te alcanzan para terminar la cajita del día de la madre…

De todas formas me voy a concentrar en la primera “Vinos de Europa, Wines of Europe”. Yo ya había tomado una clase con este señor unos meses antes, así que sabía como venía la mano y lo básico tipo “comer antes de ir a cursar, sino saldrás con un pedo patrio”. Y así fue que fui la semana pasada y me encontré con una mesa llena de botellas de vino, una heladerita de picnic, copas y un par de papeles, donde uno de esos era una tabla de degustación. Ah pará ahora tenemos que hacer de cuenta que le damos puntaje al vino?. Si señoras y señores!! Pongo cara de concentración mientras vacío la copita. Me senté y me topé con la primera de blanco. Levanté la cabeza y me di cuenta que perfectamente podría haber estado en una reunión de Alcohólicos Anónimos propensos a las recaídas en caída libre y me reí bastante, otra vez. Sola. Sin que nadie entendiera que pito me pasaba porque todavía no me tomaba la primer copita. Le di el primer sorbito y me puse a hablar con el grupo en general. Otra vez me encontré en una clase donde la más joven era yo.

Es al pedo, tengo un problema para elegir clases. Cuando tomé la de pintura no se que grupo de neuronas rebeldes de anularon y me hicieron pensar que iba a ser una clase entretenida. En cambio, fue una tortura. Hubo una clase en la que se centraron en hablar de que tipo de galletas tienen menos sodio. Yo estaba mas perdida que el Loco Juan.

Volviendo: Y así empezamos la clase entre charlas y escuchadas. Bla bla bla. Como al rato me di cuenta que habíamos abierto cinco botellas y todavía nos quedaban unas cuatro sin abrir. Me di cuenta que no había hablado mucho desde la tercer copa y que tampoco podía sin pensarlo dos veces. Yo levantaba la manito para decir que puntaje le había puesto al vino. Por suerte me di cuenta que nadie estaba mejor que yo, incluyendo al profesor que como buen gringo borracho tenía los cachetes y la nariz roja pasión. Al final de la clase ya hablábamos de cualquier cosa y yo, como de costumbre me convertí en punto de charla social, en la cual SIEMPRE hay alguien que hace alguna pregunta BIEN pelotuda sobre Argentina al estilo “hablan español ¿no?” “Está en Europa?” “ En qué parte de México está?” (esa me la hicieron en una reunión no les miento). Y mi preferida “Ustedes son comunistas?“ …

Se termino el vino y la clase una hora después de lo pactado. Agarré mi auto y me paré en un Starbucks, que, por suerte son tan pajeros los americanos que tienen drive through (es como el auto Mac pero en TODOS lados). Me pedí un rico café y me estacioné a escuchar música. Llegué a casa y Torcuato estaba jugando en la computadora. Lo saludé y le dije me voy a bañar y a dormir. Si veo que la clase estuvo buena. Si muy buena, por suerte tengo otra la semana que viene, buenas noches.